¡¡A bañarse!!

Por: Eduardo Cueto Rua

Hay muchos tipos de baños. Difieren por su sentido, forma o modo. Los hay famosos, como los BAÑOS TERMALES. En nuestro país, en Santiago del Estero están las famosas Termas de Río Hondo, en ellas han descansado infinidad de turistas, pero más aún aquellas personas que padecían dolores articulares. En ese clima seco y con esos baños mejoraron y disfrutaron de la vida y sin sufrir sus fastidiosas "artralgias" gran cantidad de hombres y mujeres, especialmente de la tercera edad.

Hay también BAÑOS DE BARRO RADIOACTIVOS, buenos para todo y por sobre toda para rejuvenecer. Hombres mayores han ido seniles y han regresado bachilleres, viejitas quejosas han vuelto como top models para tapas de revista... dicen.

Hay BAÑOS SULFUROSOS, pero con estos son tantas las ventajas que no entran en este artículo.

Llegamos a los famosos y familiares BAÑOS SOLARES. Estos han producido dos récords. El récord de insinuaciones, cuando dejaban ver las partes blancas de una piel bronceada, es decir, las ocultas al sol, que siempre han sido las prohibidas. Una pequeña área de piel blanca en cualquier parte de un cuerpo bronceado, despertaba un indio salvaje, aunque sea para sólo hacer malones de fantasías.

Otro récord producido por los BAÑOS SOLARES fue el de cáncer de piel. Antes, la gente bronceada era la que trabajaba en la cosecha estival y por estar todo el día al sol. Los pobres pálidos propietarios de los campos sólo accedían a los beneficios económicos de la cosecha. Un día, Sidonia Gabriela Colette, amante y escritora sensual de la naturaleza, apareció bronceada de uno de sus viajes de verano, sin haber estado en los surcos de una cosecha (al menos cosechando). Ese puntual día comenzó a convertirse el proletario curtimiento de la piel en un coqueto bronceado. Ese día, también, comenzaron las fantasías de las partes blancas y el cáncer de piel. Nos fuimos de un diagnostico por semana de cáncer a dos por día. ¡¡Colette!! ¡¡Colette!!

Hay también BAÑOS DE CREMAS. Las características de estos varía sustancialmente en función de quién los brinde y quién los reciba. Pueden ser terapéuticos. Los hay reparadores, unos con cremas relajantes musculares, otros con cremas vitamínicas para pieles muy secas, algunos con aceites vegetales tailandeses o malasios con oligoelementos, para una vida mejor, etc. etc.

Los BAÑOS CON CREMA son más comunes de lo que se supone y los hay públicos y privados. De estos últimos no es sencillo escribir, aunque casi siempre son lindos y terminan bien.

Y por fin hay saludables BAÑOS DE AGUA, que pueden ser para higiene personal o para recreación. He de referirme un poco a estos últimos.

Es común a nuestras costumbres vacacionales contar con el agua como aliado. Hay quienes van a la costa Atlántica, otros al Río (algunos audaces van al Río de La Plata), otros a los arroyos de la sierra y finalmente están los que se quedan por acá.

Estos últimos se bañan en clubes o en piletas de casas quintas, de la zona de Gonnet, City Bell o Villa Elisa. Se ha difundido con buen criterio ecológico reciclar el agua para evitar el despilfarro de este recurso cada vez menos renovable. Algunos proceden correctamente con esta técnica, otros no.

Estos últimos son los creadores de BAÑOS DE PARÁSITOS. Un niño puede eliminar diariamente 900.000.000 de quistes de Giardia lamblia por su materia fecal. No es infrecuente que las madres de niños de 2 a 4 años hayan disminuido el entusiasmo y la rutina higiénica que tenían con ese mismo niño cuando era un bebito, además, este nuevo personaje es en sí mismo un mugriento. Está conociendo el mundo con las manos y para él todo hay que probarlo con la boca (igual que los mayores, sólo que estos se higienizan luego) y en esta experiencia se parasita ineludiblemente.

Una hembra de Ascaris lumbricoides, ovipone 250.000 huevitos por día, una hembra de oxiuros 25.000 por día. Si tenemos en cuenta que los quistes de giardias y los huevos de hemintos resisten el hipoclorito de sodio (lavandina) es muy posible que aquellos que cuidan la pileta, eliminen y filtren ramas, hojas, pelos, cascarudos y sapos que quedan atrapados en los filtros, pero sin duda reciclan quistes y huevos. Podríamos denominarlo desde ahora BAÑOS DE HUEVOS Y QUISTES.

Esto se puede corregir o mejorar. Un baño de ducha seguro y "profundo" es muy aconsejable antes de tirarse en una pileta de uso comunitario, aunque sea familiar. Si no pueden higienizar bien un niño antes de entrar a la pileta y si la zona además, no cuenta con cloacas, el peligro de parasitarse es mucho mayor. Un cambio periódico (quincenal) además de los cuidados diarios, mejora sensiblemente la situación. Regresar el agua a la primera napa es una buena y ecológica medida, si no la puede regresar, RIEGUE, RIEGUE, RIEGUE todo lo que pueda CON EL AGUA DE LA PILETA.

Le recuerdo que un niño parasitado tiene distensión abdominal (panzón), materia fecal muy clarita y llamativamente fétida. Usted suele ver esa tarde lo que comió al mediodía. Consulte a su pediatra.

Por último, de los saludables BAÑOS DE ASIENTO no voy a hablar, estamos de vacaciones.

*Médico Pediatra Gastroenterólogo

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