Canceló su boda, así que decidió invitar al banquete a familias sin hogar

La estadounidense Sarah Cummings tenía todo listo para celebrar su casamiento el 15 de julio, pero una cancelación inesperada cambió todo. Como era tarde para cancelar la comida, decidió compartirla con personas en situación de calle.

Sarah Cummins, una estadounidense de 25 años, tenía todo listo para celebrar su boda el 15 de julio. Sin embargo, una cancelación inesperada puso todo patas para arriba. La joven había reservado el lujoso hotel Ritz Charles de Carmel, en Indiana, y había contratado un banquete para 170 personas que le había costado unos 26 mil dólares.


Según informó el portal Independent, cuando quiso dar de baja la reserva, le advirtieron que ya esto no sería posible debido a que se encontraban muy cerca de la fecha. La joven, lejos de permitir que toda esa comida sea arrojada a la basura, tomó una decisión que muchos aplaudieron: la de invitar a 170 personas en situación de calle para que disfruten del evento que había organizado con tanto amor.

"Fue devastador", reconoció Cummins. "Llamé a todos, cancelé, me disculpé, lloré, llamé a los músicos, volví a llorar, pero cuando me enteré de que toda esa comida sería arrojada a la basura, me sentí mal", explicó a los medios.


Con una entereza digna de imitar, la joven comenzó a llamar a los centros de ayuda social de la ciudad para invitarlos a la comida. El menú era de lujo: albóndigas glaseadas, brochetas de queso de cabra, pechuga de pollo con alcachofas y crema de Chardonnay y, de postre, una clásica torta de bodas.


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