La cumbre del G7 se centra en la recuperación de la pandemia

Los líderes de las economías más grandes del mundo dieron a conocer un plan de infraestructura para la recuperación de los países más pobres, en clara señal de competencia frente a las iniciativas globales de China.

Los líderes de las economías más grandes del mundo dieron a conocer un plan de infraestructura este sábado para ayudar a la recuperación del mundo en desarrollo, en clara señal de ofrecer una alternativa a las iniciativas globales de China. 

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, fue el principal impulsor de esta iniciativa, y buscó persuadir a otros líderes democráticos de que presenten un frente más unificado para competir económicamente con Beijing.

Canadá, el Reino Unido y Francia respaldaron en gran medida la posición de Biden, mientras que Alemania, Italia y la Unión Europea mostraron más dudas durante la primera sesión del sábado de la cumbre del Grupo de los Siete, según un alto funcionario de la administración de Biden. El funcionario que informó a los periodistas no estaba autorizado a discutir públicamente la reunión privada y habló bajo condición de anonimato.

El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, inauguró la cumbre del G7 en Cornualles, en el suroeste de Inglaterra, con el mensaje de que el mundo debe evitar los errores de recuperaciones previas en la pandemia, mientras Estados Unidos se prepara para una reconstrucción de la infraestructura global.

El anfitrión británico de la reunión tuvo un comienzo difícil, ya que las reuniones se iniciaron con la presión ejercida contra su gobierno por parte de los líderes europeos para que cumpliera con los términos del acuerdo Brexit en lo que concierte al comercio entre Londres e Irlanda del Norte.

El primer ministro del Reino Unido arremetió contra sus invitados europeos y advirtió que pronto podría verse obligado a suspender una parte clave del acuerdo Brexit acordado el año pasado. Dijo que los líderes de la UE tenían que "meterse en la cabeza" que el protocolo estaba interfiriendo con los mercados nacionales del Reino Unido. "Creo que, para ser justos, hay muchos malentendidos en la UE sobre la situación en Irlanda del Norte, el equilibrio del Acuerdo del Viernes Santo, el proceso de paz", dijo. "Simplemente, de una manera amable, estaba transmitiendo lo que eso significa y creo que tendremos algunas soluciones pragmáticas".

Al mismo tiempo, los líderes del G7 -Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña, Alemania, Italia, Francia y Japón- ven la reunión como una oportunidad para mostrar al mundo que las democracias más ricas pueden ofrecer ayuda a una economía global en recuperación.

En la sesión de apertura, los miembros, a los que se unieron líderes de Corea del Sur, India, Australia y Sudáfrica, escucharon al presidente del Panel de Resiliencia Económica, Mark Sedwill, antes de que comenzara la segunda sesión sobre política exterior.

Washington está decidido a garantizar que exista una alternativa positiva para los países en desarrollo y de ingresos medios que buscan restaurar el crecimiento económico después del golpe recibido durante la pandemia Covid-19.

"Anunciaremos 'reconstruir para un mundo mejor', una nueva y ambiciosa iniciativa de infraestructura global con nuestros socios del G7", dijo un funcionario estadounidense.

Biden sugirió a los líderes de la cumbre del G7 que los países democráticos deberían desarrollar su propia versión de la iniciativa de la Franja y la Ruta de China centrada en la infraestructura como plataforma para la recuperación global.

La demostración de unidad del G7 fue probada el sábado por el enfrentamiento entre el Reino Unido y los países europeos sobre el acuerdo posterior al Brexit.

El presidente francés, Emmanuel Macron, le ofreció a Johnson un reinicio en la relación el sábado por la mañana, luego de meses de confrontación, particularmente sobre el protocolo de Irlanda del Norte.

Se informó que Macron dijo que los dos países tienen una visión común para las relaciones internacionales y transatlánticas, incluido el control de armas, pero que era necesario resolver las tensiones del Brexit.

El presidente francés le dijo a Johnson que Gran Bretaña necesita mantener el acuerdo del Brexit que firmó, a pesar de un enfrentamiento sobre las nuevas reglas comerciales en Irlanda del Norte.

Gran Bretaña debería "mantener su palabra" a Europa, dijo Macron.

Los funcionarios franceses dijeron después que el presidente, subrayó enérgicamente que "este nuevo compromiso requiere que los británicos cumplan las promesas hechas a los europeos y respeten el acuerdo Brexit".


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